+ Necesario un cambio en la señalética e infraestructura con modernidad electrónica en el transporte urbano
Zenén Campos Beas, presidente de la Federación de Transporte Urbano y Suburbano del Estado de Colima, dio a conocer que el sistema de transporte en el estado se encuentra descapitalizado derivado de la pandemia.
Señaló que el cierre de restaurantes, escuelas y dependencias de gobierno impactó negativamente en la economía de los transportistas quienes nunca dejaron de brindar el servicio, generando un deterioro acelerado de los camiones en la entidad.
“Cumplimos con todas las normatividades que dictó la Secretaria de Educación y el Gobierno del Estado haciéndolas cumplir con inversiones propias, no hubo ningún apoyo de gobierno ni del anterior, ni del actual”, mencionó.
De igual modo, resaltó que el apoyo que como prestadores de servicio otorgan a las familias colimenses a través de descuentos del 50 por ciento a estudiantes, personas con discapacidad y tercera edad pese al problema económico registrado antes y después de la pandemia para este sector.
Aunque las reuniones con la Subsecretaría de Movilidad se encuentran suspendidas desde el año pasado, resaltó continúan trabajando en proyectos de modernidad para el sistema transportista, donde se requiere la cambiar la señalética e infraestructura actual, pues algunos semáforos cuentan con 40 años de uso.
Recordó que durante el sexenio de José Ignacio Peralta Sánchez se implementaron los botones de pánico los cuales eran monitoreados a través del C4, sin embargo, hoy en día han quedado obsoletos, por lo que precisó el tema del transporte debe irse modernizando en razón directa de la modernidad de la ciudad.
“Tener un servicio de esta naturaleza obligaría a tener unas mejoras en materia de infraestructura urbana, porque no podemos modernizar el transporte si la ciudad es la misma (…) los proyectos tienen que caminar de la mano de gobierno del estado”, concluyó.